DEEP PURPLE - Come taste the band

Cuando Ritchie Blackmore abandona Deep Purple en 1975 por diferencias con el resto de la banda, al principio tanto Jon Lord como Ian Paice tenían pensado separar la banda pero ante la insistencia de David Coverdale y Glenn Hughes, decidieron buscar un nuevo guitarrista. Así, luego de que Coverdale escuchara el álbum "Spectrum" de Billy Cobham donde participa el juvenil violero Tommy Bolin, deciden incorporarlo a Deep Purple. Al cabo de unos meses se edita "Come taste the band", un disco singular que fue bien recibido por el público.



El disco arranca con "Comin' home", una entrada a lo "Fireball" o "Burn" y un ritmo bien rock and roll que atrapa desde el inicio y la guitarra de Tommy Bolin sobresale por su virtuosismo y efectos, algo similar a lo que Blackmore venía haciendo.
"Lady luck" comienza a mostrar el lado funk soul que la banda venía insinuando en "Stormbringer" con un Coverdale al frente.
"Gettin' tighter" sigue la misma línea donde Glenn Hughes se hace cargo de la voz principal (que por momentos se parece a Steve Wonder) y con un bajo bien funk soul que le queda como anillo al dedo.
Otro destacado en la misma línea musical es "I need love" con un estilo marcado que sólo Bolin podía dar.
"Love child" es más hard que recuerda épocas anteriores de la banda mientras que "Owed to G" es la parte instrumental donde Bolin es el protagonista.
El disco culmina con "You keep on moving" con la dupla vocal Coverdale-Hughes, un tema éxito que Glenn Hughes sigue ofreciendo en sus shows.
El álbum no es el típico trabajo como "Machine head", "In rock" o "Burn" pero muestra a Deep Purple (con la formación Mark IV) en su etapa que fue productiva aunque en vivo la banda estaba destinada a separarse por los excesos de Bolin.

Deep Purple Mark IV: Tommy Bolin, Glenn Hughes, Jon Lord, David Coverdale (arriba) e Ian Paice



LA PLATA PROG 2011 - Fechas

Aquí están las fechas del festival progresivo único en el país y en Sudamérica. Vayan agendando los días porque será imperdible. Las entradas tienen un valor de $20 (veinte pesos). Y si luego de ir a un concierto decidís ir a otro, no tires tu entrada o ticket. Guardala que presentando el mismo pagás sólo $15 (quince) y así sucesivamente. Oportunidades como éstas no se presentan todos los días.



IMÁGENES DE RADIO

Para que vean cómo es el estudio de la FM Record donde hacemos "EL NÚCLEO", aquí les dejo unas imágenes que nos pintan tal cual somos.

Preparándome para entrar en el estudio de radio

Rodrigo Vernón a puro mate y rock and roll

Quito Ferrucci y Laro Bidonde de Los Olvidados

Junto a Daniel Villaverde

Entrevistando a los chicos de Serenos Navegantes

Marcos Antonelli de Post Mortem

Lorena Pescio de Sugar Mice respondiendo a la pregunta ácida de Aníbal Acuaro

Pablo Huerta de La Increíble Fuga de Triángulos y Aníbal Acuaro

Junto al señor Gustavo Ceaglio, guitarrista de Sugar Mice

Daniel Villaverde la pasa muy bien en la 106.7 igual que todos nosotros.

"EL NÚCLEO" (La cultura del Rock) es nuestro espacio y el de todos ustedes.

Sígannos todos los sábados de 13.00 a 15.00 hs. por la FM RECORD 106.7

BLACK SABBATH - Heaven and Hell

Luego de editarse en 1978 el disco "Never say die", quedó en claro que Black Sabbath no podía seguir soportando a un Ozzy Osbourne arruinado por las drogas y el alcohol, por lo que deciden separarlo de la banda y buscar un cantante más apropiado. Y lo consiguieron en Ronnie James Dio.
Dio hacía un año que se había separado de Rainbow debido a la dirección musical que estaba por tomar ese grupo, algo más orientado al hard rock americano.
La química que se produjo entre Dio y el resto de los Sabbath (Tony Iommi, Geezer Butler y Bill Ward) fue tal que funcionó a la perfección generando canciones más heavys acorde con la época que se estaba viviendo. El resultado fue "Heaven and Hell", un disco que hoy es considerado de culto por el heavy metal y el rock en general.



Fue grabado en el Reino Unido, producido por Martin Birch (Deep Purple, Whitesnake, y luego Iron Maiden) y editado en 1980 por el sello Vertigo.
El disco arranca con "Neon knights", un tema poderoso con un riff aplastante y con una melodía pegadiza.
Le sigue otro tema de excepción llamado "Children of the sea", en donde Dio se destaca por su interpretación contando historias de terror atrapantes.
El tema "Heaven and Hell" se consagró como un himno en la carrera de Sabbath con su ritmo galopante y bien pesado en donde Ronnie canta sobre bases de bajo y batería y las apariciones "fantasmagóricas" de Iommi, culminando con un ritmo ligero que desemboca en un acústico de esplendor.
Otro tema destacado es "Die young" con la magistral introducción de teclados a cargo de Geoff Nicholls, músico que haría todas las partes de teclado de ahí en adelante.
El disco está hecho con pasión, entrega y gran capacidad interpretativa por parte de sus músicos. La llegada de Ronnie J. Dio le dio a Sabbath una nueva oportunidad que sin dudas salió triunfante en todo sentido.



PINK FLOYD - The wall

Sin dudas uno de los mejores discos de la historia del rock. Fue el undécimo trabajo de Pink Floyd que se editó en 1979 y fue producido por Bob Ezrin. Se grabó entre los meses de abril y noviembre de ese año.



"The wall" es una obra conceptual basada en la historia de una estrella ficticia del rock llamada "Pink", quien en su mayoría son vivencias de su antiguo líder Syd Barret.
Las interpretaciones de Roger Waters describen a la perfección la obra que se pretende mostrar, como así también las intervenciones vocales de David Gilmour, sin despreciar para nada sus cualidaddes como guitarrista.
De todas las canciones "Another brick in the wall" fue un  tema que durante años se bailó en las discos del mundo. "Goodbye blue sky" trae esas atmósferas que sólo Pink Floyd puede lograr con un juego de voces formidables. Párrafo aparte es "Comfortably numb" donde la guitarra de Gilmour se adueña del tema.
"Run like hell" es el momento más violento y rítmico del disco creando esos climas de misterio y terror únicos.
"The wall" destaca por ser un disco donde el grupo sobresale al 100% (Waters, Gilmour, Wright, Mason) que cuenta con el aporte de varios músicos de sesión: Bob Ezrin, Jeff & Joe Porcaro, Fred Mandel, Lee Ritenour, y otros.
La película que acompañó a este disco es capítulo aparte. La misma se estrenó en Argentina recién en 1984 y fue un suceso total.



DEEP PURPLE - The book of Taliesyn

Segundo disco de Deep Purple con su formación original: Ritchie Blackmore, Rod Evans, Jon Lord, Nick Simper, Ian Paice. Se diferencia del primero por ser un poco más pesado que la guitarra de Blackmore le supo dar, y de paso marcaba un camino a seguir por parte de él y Lord.



Fué publicado en julio de 1969 en el Reino Unido y en octubre de ese mismo año en los Estados Unidos. Contiene 7 temas de los cuales 3 son covers: "Kentucky woman" de Neil Diamond, "We can work it out" de The Beatles y "River deep, mountain high" de Barry, Spector y Greenwich que fue muy conocida por la versión que hicieron Ike & Tina Turner.
El resto mantiene un nivel entre lo psicodélico y hard rock que el trío Blackmore-Lord-Paice quería imponer y que le diera resultados favorables hacia 1970.
"Wring that neck" es un instrumental donde las habilidades tanto de Ritchie como la de Jon saltaban a la vista (o al oído), que por esas épocas se incluía en los sets en vivo incluso durante la etapa Gillan-Glover y en 2000 junto a la London Simphony Orchestra.
Lo mejor del disco (para mi gusto) es "Anthem" donde Lord realiza un solo de órgano Hammond junto a un grupo de cuerdas que viene como anillo al dedo. Otro tema destacado es "Shield".
Rod Evans demuestra ser un buen vocalista pero no para esta banda ya que tenía influencias de cantantes pop como Tom Jones o Neil Sedaka, en tanto Simper cumple con aciertos su parte en el bajo, por eso se sorprendió cuando lo echaron en 1969 para ser reemplazado por Roger Glover por sugerencia de Ian Gillan.
"The book of Taliesyn" se editó en Argentina un poco tarde (1985) pero sirvió para ver cómo sonaba Deep Purple en sus comienzos.



IRON MAIDEN - The number of the beast

A principios de la década del ochenta se da un fenómeno llamado la "nueva ola" del heavy metal y entre sus exponentes se hallaba Iron Maiden, banda británica que en sus comienzos derramaban un cocktel de heavy y punk que prendió la mecha de todo lo que vendría después.
Bajo el liderazgo del bajista Steve Harris y acompañado por los guitarristas Dave Murray y Adrian Smith, Iron Maiden transitó con certeza un camino hacia la consagración que llegaría en 1982 con su disco "The number of the beast", que fue publicado en 29 de marzo de ese año por el sello EMI y producido por Martin Birch (prócer del hard rock que produjera a Deep Purple y Whitesnake).

Este disco es el tercero grabado en estudio y presenta como novedad a su nuevo vocalista Bruce Dickinson quien reemplazara a Paul Di Anno con quien la banda grabara sus dos primeros discos "Iron Maiden" y "Killers". También fue el último con el baterista Clive Burr quien luego se alejaría del grupo para ser reemplazado por Nico McBrian.

"The number of the beast" hizo que el grupo inglés se afianzara totoalmente en su propuesta sobre lo oscuro y satánico, y vendió tanto que alcanzó el primero puesto en el Reino Unido.

"Invaders", "The prisioner", "Run to the hills", "Gangland" y el tema que da título al disco, son considerados clásicos hoy en día por la prensa y el público.

Con el tiempo se incluyó el tema "Total eclipse" que fue lado B de "Gangland".

El paso del tiempo ha logrado que la banda siga su evolución y basta con verlos en vivo para darse cuenta que son un grupo heavy que abrió muchas vías dentro del estilo y que otros han sabido aprovechar sin ignorar esta influencia.



COVERDALE - PAGE

Recuerdo un titular de la revista Pelo de 1982 que decía: "Vuelve Jimmy Page con Whitesnake". Imaginen mi sorpresa por ese entonces porque la Serpiente se encontraba con un desbande de músicos y Page luego de la disolución de Led Zeppelin tuvo una carrera errática salvo por un par de colaboraciones para la banda sonora de una película.
Pasaron diez años y en 1992 Whitesnake volvía a encontrarse en similar situación y su líder, David Coverdale, había mantenido coversaciones con su amigo guitarrista creador de "Starway to heaven". La idea era reflotar Zeppelin y ante la negativa de Robert Plant, el nombre del ex Deep Purple David Coverdale parecía tentar al resto de los zeppelianos.
Claro, los fans de Led Zeppelin al enterarse de esta movida montaron en cólera porque tildaban a Coverdale como "imitador" de Plant más aún cuando Whitesnake editó "Still of the night" de su álbum "1987".
Todo este lío desembocó en una experiencia de dúo llamado simplemente "Coverdale-Page" y no Legends como se había hablado en un principio.



El disco editado en 1993 resultó ser una verdadera joya del hard rock que rápidamente acaparó la atención del público.
Si digo que algún tema se parece a Zeppelin estoy diciendo algo muy obvio. Desde el vamos con "Shake my tree" el disco es contundente en cuanto al sonido. Un Zeppelin de los 90.
"Take me for a little while" es un tema un poco más relajado donde el estilo ya se asemeja más a Whitesnake que siempre soñó tenerlo a Page como guitarrista.
"Over now" es el "kashmir" del disco pero sin querer reciclarlo, notable.
"Easy does it" es para mí el mejor tema del disco con un comienzo acústico que sólo Page sabe hacer y que explota con una base bien a lo Bonzo por parte del baterista Danny Carmasi.
Otro destacado es "Absolution blues" que destaca por la consistencia y presición interpretativa.
En suma, "Coverdale-Page" es otro de esos discos que considero indispensable para todos los amantes del buen rock en general.



QUEEN - Sheer heart attack

Apenas salió a escena en 1971, Queen recibió muchas críticas porque los comparaban con The Beatles y Led Zeppelin, diciendo que eran pálidas imitaciones.
Pero su primer disco editado en 1972 titulado simplemente "Queen" fue una sorpresa para el público que poco a poco comenzó a consumir esta banda inglesa que tenía nuevos talentos como Brian May (guitarra, coros), Freddy Mercury (voz, piano), John Deacon (bajo) y Roger Taylor (batería, coros).
Ya en 1973 y con "Queen II" la banda comenzó a afianzarse en el circuito británico siendo más considerada por la prensa; y en 1974 su tercer disco "Sheer heart attack" los coloca como uno de los grupos de rock más importantes de la década del 70.



Queen despliega en este disco un cóctel de hard rock, algo de blues, rock progresivo y swing jazz perfectamente equilibrado.
"Brighton rock" es la entrada con un tema bien pesado donde Brian May realiza un solo estupendo. "Killer queen" es el single de éxito del disco con la inigualable voz de Freddy.
Otro tema (obligado en los shows) es sin dudas "Now I'm here" de May, que derrocha un buen rock and roll setentoso.
"In the lap of the gods" le pone el toque progresivo y sinfónico al disco, mientras que "Stone cold crazy" muestra a Queen en su faceta heavy.
El resto de las canciones son piezas bien interpretadas que asientan a la banda definitivamente.
Otro disco para aquellos heavys que quieran explorar las raíces del género en los 70s.