Pero la explosión de ellos fue en 1978 con la épica película "Saturday Night Fever" que protagonizó John Travolta en donde los hermanos Gibb (Barry, Robin y Maurice) plasmaron cinco nuevos temas más dos éxitos de años anteriores.
Pasó la fiebre y en los finales de los 80s volvieron con nuevos aires. El paso del tiempo se llevó a su hermano menor Andy que ya iba a ser parte oficialmente de los Bee Gees.
Ya en 2001 la banda graba lo que sin saberlo sería su último disco "This is where I came in" y los encuentra con los orígenes de su carrera en donde todo era rock and roll y The Beatles eran su gran influencia.
El disco comienza con la canción que da título al mismo donde se puede apreciar la influencia de Lennon en la voz de Robin Gibb. Un hard rock que bien podría haber sido grabado en 1969.Lo que sigue mantiene la onda rock con "She keeps on coming" que parece más bien un tema para Paul McCartney. Muy acertado.
"Man on the middle" es el momento de Maurice Gibb donde se hace cargo de la voz principal y la guitarra acústica.
Hay otros temas como "Deja Vu" o "Embrance" donde Robin hace su parte solista; también Barry Gibb tiene su momento con "Loose talk coast life" y "Technicolor dreams".
El final del disco es con "Voice in the wilderness" que si uno no sabe que está escuchando un disco de los Bee Gees, pensará que se trata de una banda de heavy metal. Eso demuestra que ellos eran capaces de hacer buen rock.
Lo que vino después a principios de 2002 fue la inesperada muerte de Maurice Gibb donde precipitó el final para esta banda que entró en el Salón de la Fama luego de haber grabado tantos éxitos por décadas que hicieron vibrar a varias generaciones.
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